martes, 22 de agosto de 2017

La Reunión en 2017 del Furtivo Grupo Bilderberg

Jesús Hernández Garibay

Del jueves 1º al domingo 4 de junio el siempre hierático Grupo Bilderberg llevó a cabo en este año su 65° cenáculo, en un hotel de la ciudad de Chantilly, Virginia, en Estados Unidos. Como se sabe, habiendo nacido en los Países Bajos desde 1954 ―creado, según se ha conocido luego de muchos años, por la CIA y el MI5, para fortalecer a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN)―, como un foro privado, según esto, de “intercambio de opiniones”, dicho grupo no ha dejado de congregar cada año a la más selecta élite política, empresarial y financiera de Europa y Norteamérica.

En esta ocasión reunió a 131 invitados de 21 países, entre ministros, académicos, empresarios millonarios, directores de medios y de instituciones financieras, y miembros de la llamada nobleza. Según el propio grupo, una diversidad que incluyó a varios ejecutivos de bancos como Goldman Sachs, Deutsche Bank, BP, además de viejos y nuevos actores como los jefes de Google, AT&T, Bayer, Airbus, AXA, Allianz, ING; todos interesados en el tema de si es pertinente poner un freno a la globalización, pues es éste, como se dijo ahí, “el aire que respiran”.

El gran ausente fue el recién fallecido multimillonario David Rockefeller, uno de sus principales propulsores quien siempre acompaño al grupo junto con el ex-secretario de Estado Henry Kissinger. Del Bilderberg, Rockefeller decía justo en 1991: “Estamos agradecidos con [los medios informativos] cuyos directores han asistido… y respetado sus promesas de discreción durante casi cuarenta años. Habría sido imposible para nosotros desarrollar nuestro plan para el mundo si hubiéramos sido objeto de las brillantes luces de la publicidad durante esos años. Pero el mundo es ahora más sofisticado y preparado para marchar hacia un gobierno mundial...  La soberanía supranacional de una élite intelectual y banqueros del mundo es seguramente preferible a la autodeterminación nacional practicada en siglos pasados…”

“Soberanía supranacional” que debatió en este año cuestiones tales como “Las relaciones transatlánticas”, “La actividad de la OTAN”, “Las guerras de información”, “El papel de Rusia en el orden mundial”, “China” y “La proliferación de armas nucleares”, entre otras. No obstante, la ponencia central fue “La Administración Trump: informe de avances”; un enunciado éste que explica que hay en el grupo un reconocimiento y aceptación previa del polémico presidente.

Según fue conocido, un asunto derivó ahí en un enconado debate: el que se dio entre partidarios y adversarios acerca de la “conveniencia” o no del terrorismo islamista. Al respecto, hubo objeciones a lo dicho por Donald Trump en Arabia Saudita y en la cumbre de la OTAN, en que el mandatario trató de convencer a sus aliados y socios de que deben abandonar a la Hermandad Musulmana (ISIS) a la que respaldan, han armado y dirigen; un emplasto a través del cual Estados Unidos, Francia y el Reino Unido se han dedicado durante años a organizar una guerra contra el gobierno legítimo de Siria mientras fingían negociar una salida política a ese conflicto. Y frente al que hoy no saben qué hacer por causa del costo que han ocasionado las cada día más frecuentes acciones terroristas del mismo ISIS en sus propios países.

22 de agosto de 2017.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 13 de agosto de 2017)
El Otoño del Imperio

No hay comentarios.:

Publicar un comentario