lunes, 27 de agosto de 2012

¿El Mundo Ante un Colapso Financiero Inminente?

Jesús Hernández Garibay

El pasado 10 de agosto revela la agencia noticiosa Reuters que “Funcionarios reguladores de Estados Unidos instruyeron a cinco de los mayores bancos del país, incluyendo Bank of America y Goldman Sachs, a desarrollar planes a fin de aplazar un colapso financiero, previendo un escenario en que los bancos puedan no contar con la ayuda del gobierno…” Un artículo de Terry Weiss en Money Morning, el mismo día, recuerda que Richard Duncan, tiempo atrás economista en jefe del Banco Mundial, decía recién a la BBC que los 16 billones de dólares de la deuda norteamericana podrían resultar en una depresión tan severa que “no creo que nuestra civilización pueda sobrevivir a ella”.

Cada día que pasa, diversos signos de que un gran colapso financiero puede barrer en cualquier momento a las grandes economías del mundo ―primeramente Estados Unidos y Europa―, son más y más contemplados por altos funcionarios y analistas; una crisis con repercusiones mucho más graves que las del 2008. Nigel Farage, un político británico de derecha, miembro del Parlamento Europeo, hablaba también el 24 de mayo (King World News) sobre lo que describe como un posible “colapso bancario realmente dramático”; de su parte, el economista de la Universidad de Nueva York, Nouriel Roubini,  ha insistido en que la crisis que se avecina será aún peor que la de aquel año.

Según el parecer de otros, en varias partes del mundo gobiernos y grandes bancos están actuando como si anticiparan también dicho colapso financiero. Michael Snyder dice respecto a las instrucciones secretas del gobierno norteamericano a aquellos cinco bancos: “Por sí solo eso no sería tan importante. Pero al agregar esto a las docenas de otras pistas…, una imagen muy preocupante comienza a emerger. En los últimos 12 meses han renunciado cientos de ejecutivos de la banca, mientras empleados corporativos han estado vendiendo enormes cantidades de acciones...” (Infowars.com, 13 de agosto). Todos, al parecer comportándose bajo la lógica y la consigna del “sálvense quien pueda”.

En este sentido destaca el caso del escándalo de la Tasa LIBOR (London Inter-Bank Offered Rate), un punto de referencia mundial para las tasas de interés de corto plazo que impone el banco inglés Barclays Wealth, apoyado por los 16 principales bancos que operan en Londres (Royal Bank of Scotland, HSBC, Lloyds Bank TSB, Bank of America, Citigroup, J.P Morgan Chase, entre otros); como ha sido mencionado por la prensa, el manejo de la Tasa podría representar el caso más grande de corrupción financiera en la historia: un cartel bancario dedicado a la manipulación de mercados, desfalcos y lavado de dinero. Destaca también el estudio de Tax Justice Network (21 de julio), acerca de la existencia de entre 21 y 32 billones de dólares hoy escondidos en paraísos fiscales como Suiza o las islas Caimán, por bancos y por muchas de las 92 mil personas más ricas del mundo (el 0.001% de la población mundial). Todos tratando de salvarse de lo que pueda llegar, así sea a costa del hambre cada día más severa para los pueblos del mundo.

27 de agosto de 2012.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 26 de agosto de 2012)
El Otoño del Imperio

domingo, 19 de agosto de 2012

Se Prepara el Ejército de EUA para Enfrentar Disturbios Domésticos


Jesús Hernández Garibay

Uno de los numerosos preparativos para operar una ley marcial en Estados Unidos que se advierte ocurren en toda la nación, tuvo lugar durante la primera quincena de este mes de agosto en el Condado de Sheboygan, Wisconsin, donde fueron realizados ejercicios de entrenamiento con una formación de vehículos militares de seguridad M1117, antes utilizados en Afganistán para cazar insurgentes. Tales ejercicios se llevan a cabo en apoyo a la ley sancionada por el presidente Barack Obama en diciembre del año pasado, que busca desplegar tropas armadas dentro de Estados Unidos para detener una eventual rebelión o insurrección, así como en general sucesos considerados fuera de la ley.

Previamente, en 2010 había sido dada a conocer la Normativa para las Operaciones de las Fuerzas Armadas 2016-2028 (US Army’s Operating Concept 2016-2028); ahí se explica cómo deben de comportarse en el futuro dichas fuerzas armadas tanto en su país como en el extranjero y se describen operaciones tácticas específicas. Es este un manual de operaciones “de espectro completo” que detalla Estrategias presidenciales de Seguridad Nacional sobre cómo defender a la República dentro de las fronteras nacionales, con propuesta de escenarios en los que grupos de activistas se posesionan de un área importante de una ciudad, que requiera que el ejército apoye tanto a la policía local como a funcionarios y representantes de los gobiernos locales.

Más recientemente, el Pentágono ha pedido al Congreso que deje a un lado el Acta Posse Comitatus (PCA), con el objeto de aumentar el uso de militares en las calles de la Unión Americana. La sección 1385 de dicha Acta, establece que “excepto en casos y circunstancias expresamente autorizados por la Constitución o la ley del Congreso, quienquiera que intencionalmente utilice cualquier parte del ejército o la fuerza aérea para hacer cumplir las leyes, será multado o encarcelado por un periodo no mayor de dos años, o ambos…” Dado que en la actualidad policía especializada militar está trabajando con policía local, el Pentágono intenta aliviar las “restricciones legales sobre las actividades de las fuerzas armadas”, al pretender convencer al Congreso de que el Acta es innecesaria.

En junio último, las Fuerzas Armadas solicitaron a empresas militares ofertas de venta de material antidisturbios, en equipo que debía de entregarse en la Academia West Point de Nueva York; el propósito de estas unidades sería el de ayudar en el “control de disturbios”. En tiempos de insurrección, el poder ejecutivo puede demandar apoyo armado a los gobiernos de los Estados y los cuerpos policiacos locales, puesto que “la continuidad del gobierno es prioritaria y debe ser preservada”. En esta eventualidad, el espionaje doméstico ha sido ya convertido en primordial, con el objeto de mantener una clara cadena de mando militar para poder detener a cualquier insurgencia que brote en algún sitio. Específicamente al Servicio Federal de Protección (FPS) se le ha dado la responsabilidad de proteger la propiedad federal, ante disturbios esperados en un futuro próximo.


19 de agosto de 2012.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 19 de agosto de 2012)
El Otoño del Imperio

La Pasmosa Deuda Pública de Estados Unidos

Jesús Hernández Garibay

Bajo las actuales condiciones del mercado, no existe ninguna fórmula matemática para que la deuda pública de Estados Unidos pueda ser pagada; el país ha acumulado la deuda más grande en la historia del mundo. Ya desde 1986 esa deuda había alcanzado los 2 billones de dólares, en tanto que en 2005 era de 8 billones; pero en este 2012 está a punto de cruzar la marca de los 16 billones de dólares. Si la tasa de interés promedio en dicha deuda subiera tan sólo el 7%, el gobierno tendría que pagar en intereses más de 1 billón de dólares por año; por algo es que esa deuda alcanza más de un tercio de toda la deuda de los gobiernos de todo el mundo.

El análisis de Michael Snyder (The Economic Collapse) es preciso: en proporción al Producto Interno Bruto (PIB nacional), hoy dicha deuda es mayor al 100%, mientras que un reciente documento del FMI pronostica que la misma se elevará a cerca de 400% del PIB para el año 2050. Entre 2007 y 2010, el PIB de EUA creció tan sólo un 4,26%, pero en cambio la deuda nacional aumentó un 61% durante ese mismo período. A la vez, se prevé que la deuda nacional superará los 23 billones de dólares en 2015; así, aunque el gobierno federal empezara en este momento a pagar la deuda nacional a razón de un dólar por segundo, tardaría más de 480 mil años para pagarla completamente.

De acuerdo al mismo Departamento del Tesoro, a finales del tercer trimestre del año fiscal 2012, la nueva deuda acumulada en este año por el gobierno federal ya había superado el billón de dólares, siendo este el quinto año en el que el gobierno aumenta su deuda en esa cantidad. En el año fiscal 2007, la deuda aumentó poco más de 500 mil 600 millones de dólares, pero a partir del 2008, ha aumentado anualmente más de un billón de dólares. Específicamente en este 2012 se espera que dicho aumento alcance la friolera de más de un billón 354 mil millones de dólares (según cálculos de Terence P. Jeffrey en CNSNews, al 19 de julio), ¡una tasa promedio de 3 mil 700 millones de dólares cada día!

Claro, a medida que la economía norteamericana continúa desmoronándose más estadounidenses dependen financieramente del gobierno federal. Millones han perdido sus trabajos y han necesitado de la ayuda del gobierno; por ejemplo, el gasto en apoyo alimenticio se ha duplicado desde 2008, pues el número de estadounidenses en cupones de alimentos ha pasado de 32 a 46 millones.

El programa de salud de Barack Obama, de su parte, también hace crecer la deuda, pues se pronostica que sumará más de 2,60 billones de dólares a la deuda nacional tan sólo durante la primera década. Pero lo que más pega a las finanzas gubernamentales es el voraz animal de la guerra; en los 10 años transcurridos desde los ataques del 11 de septiembre de 2001, el presupuesto anual de defensa se duplicó a 700 mil millones de dólares, mientras que las ganancias anuales de la industria militar casi se cuadruplicaron, acercándose a unos 25 mil millones de dólares en el año 2011. Un vicioso círculo imposible de romper, aun con la disminución del presupuesto militar.

19 de agosto de 2012.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 12 de agosto de 2012)
El Otoño del Imperio

miércoles, 1 de agosto de 2012

Arrecia la Campaña Presidencial en Estados Unidos

Jesús Hernández Garibay

En un viaje llevado a cabo por Gran Bretaña, Israel y Polonia, a 100 días de las elecciones, Mitt Romney aspiraba a alcanzar el mismo éxito logrado por Barack Obama con una visita a Europa en 2008, antes de ganar la presidencia; pero unas desatinadas declaraciones suyas, en las que puso en duda las medidas de seguridad en los Juegos Olímpicos que comenzaban en Londres, le granjearon al candidato republicano duras críticas por parte de políticos y medios británicos, e hicieron poco por presentarle como un estadista de nivel internacional. Es este el más reciente traspié dado en la ascendente campaña por la presidencia de Estados Unidos, en que las baterías se preparan para la batalla final.

No obstante, a sólo unas 12 semanas de los comicios, los resultados de las encuestas continúan repartiéndose por igual, tanto en el sentido positivo como en el negativo. La encuesta de NBC-Wall Street Journal de hace poco más de una semana, deja ver que el 43% de los encuestados ven al presidente Obama negativamente mientras que el 40% ve a Romney de la misma manera. No obstante, Obama conserva ventajas significativas; por 2 a 1 está calificado como “más agradable” que Romney y que además entiende mejor los problemas que los estadounidenses enfrentan en su vida diaria, con una ventaja de 8 puntos a ser visto como “honesto y confiable”. Pero en otro sentido el margen es estrecho, pues mientras que el 57% opina que Obama “tiene la personalidad y cualidades de liderazgo que debe tener un presidente”; el 54% dice lo mismo de Mitt Romney.

Romney, sin embargo, tiene ventaja cuando se le advierte como una persona “capaz de hacer las cosas”; por más de 2 a 1, o sea 63% a 29%, los encuestados dicen que la experiencia del republicano como empresario le llevaría a “tomar más buenas decisiones que malas”, al tener que ocuparse de los problemas económicos de la nación; un tema en el que persiste decepción frente a Obama, por causa de la frágil recuperación y la alta tasa de desempleo, que es de lo que se culpa al presidente. A la vez, un 61% opina que el gobierno está tratando de hacer “demasiadas cosas” que deberían dejarse a los individuos y a las empresas. El número más alto desde que Gallup comenzó la pregunta en 1992.

Como quiera que sea, a tres meses de los sufragios la batalla por la Casa Blanca ya ha rebasado la marca de los mil millones de dólares gastados por los candidatos presidenciales, sus partidos políticos y los dos Super Comités que vienen recolectando dinero para favorecer la imagen tanto de Obama como de Romney. Pero el gasto más grande está apenas por venir en la carrera por la presidencia, que podría alcanzar ¡¡un impresionante gasto total de 3 mil millones de dólares!!, de acuerdo con el Center for Responsive Politics que rastrea el dinero de la campaña; ello como consecuencia de un decreto de la Corte, que permite a los empresarios a gastar fondos ilimitados para apoyar a cualquiera de los candidatos. Claro, sugiere algún ciudadano en respuesta a esos datos: “Podríamos estar usando todo este dinero para escuelas, carreteras, puentes y crear buenos empleos...”

1º de agosto de 2012.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 5 de agosto de 2012)
El Otoño del Imperio

La Marcha de los Desempleados a Madrid

Jesús Hernández Garibay

El pasado sábado 21 de julio, tras casi un mes de caminata desde diferentes puntos de España llegaron a Madrid nutridas marchas de desempleados; miles de madrileños acudieron a arroparlos y recibirlos con aplausos en su trayecto desde el Paseo del Prado hasta la Puerta del Sol. Ahí entre gritos, los manifestantes exigían la dimisión de su presidente Mariano Rajoy; luego, en la Puerta del Sol se celebró una “asamblea de desempleados”. A lo largo del día, las marchas llegaron a la capital desde ciudades como Barcelona, Córdoba, Zaragoza o el Bajo Aragón, mientras que otros contingentes marchaban desde el Ministerio de Empleo hasta el centro de la capital, donde se unieron a los llegados de otras partes del país para protestar contra el paro y la precariedad laboral.

Y es que la crisis económica en España no merma en intensidad y continúa golpeando con especial dureza a las familias que no pueden pagar el alquiler o la hipoteca, ahogadas por el desempleo y la consiguiente falta de ingresos. El primer trimestre del año, por ejemplo, marcó un nuevo récord en el número de desahucios (lanzamientos o desalojos) ordenados por los juzgados, con 46 mil 559, una media de 510 procedimientos cada día, según cifras oficiales. Las demandas por despido se dispararon también a 33 mil 651 en los tres primeros meses del año, un 10,6% más que en 2011 en el mismo periodo, mientras 2 mil 541 empresas entraban en concurso de acreedores (suspensión de pagos), un 20% más que en el primer trimestre del año pasado.

Dos días antes, el 19 de julio, miles de personas habían ya tomado las calles del centro de Madrid y de otras 80 ciudades, para protestar contra los recortes del Gobierno. La manifestación fue convocada por los principales sindicatos en respuesta a los últimos recortes decretados, que incluyen el aumento del IVA del 18 al 21%, el retiro de los pagos extraordinarios y eliminación de días de permiso para los funcionarios y la baja de las prestaciones por desempleo, entre otras medidas. A las marchas se sumaron decenas de organizaciones como el 15-M (Indignados), colectivos de desempleados y entidades vecinales, bomberos, policías, funcionarios, estudiantes y profesionales de todo tipo.

En 2007, último año del “ciclo triunfal” de crecimiento, la tasa de desempleo en el país era del 8,3%, mientras que en el primer trimestre de 2012 alcanzó un 24,4% (3,8 millones de nuevos desocupados). Además, se incrementó notablemente el desempleo de un año o más de duración (del 23,7% al 43,3%) y el porcentaje de hogares con todas las personas activas sin empleo (del 3,2% al 13,3%; de 390 mil a 1,7 millones). Ante la pretendida solución del gobierno, decían los marchistas: “Quieren hacernos creer que sus recortes van a solucionarlo, pero ya no les creemos…” Y puntualizaban en la Puerta del Sol que tomaban las calles de Madrid, para seguir diciendo “que vuestra crisis no la pagamos, que no tenemos miedo, que tenemos confianza en nosotras, las personas, y que no vamos a seguir tolerando que nos roben para rescatar a banqueros…”

1º de agosto de 2012.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 29 de julio de 2012)
El Otoño del Imperio