domingo, 8 de febrero de 2015

La Crisis Arrecia, a Pesar de la Recuperación de Estados Unidos

Jesús Hernández Garibay

El reciente anuncio de un “recorte preventivo” en el gasto público en México, por causa de un déficit de $124 mil millones de pesos, “un enfoque… para enfrentar… la complejidad de 2016 y de los años por venir”, según el secretario de Hacienda mexicano, demuestra que la crisis sistémica global sigue avanzando en el mundo, no obstante la reactivación de la economía de Estados Unidos, y comienza a agravar la de por si frágil situación de muchos países, incluso aquellos que por su apego al vecino del norte, pudieran estar en mejores condiciones para aprovechar la recuperación, así sea endeble, de esa economía.

La medida del gobierno mexicano, derivado de un “cambio en las condiciones financieras internacionales, la menor perspectiva de crecimiento de la economía mundial y la previsión de que los precios del crudo se mantendrán bajos por varios años…”, habla justo de eso que se advierte como una negra nube en el panorama mundial: una crisis por venir, más grave que cualquiera de los últimos años. Por el momento y respecto a la economía mundial, el FMI recién ha recortado en tres décimas el aumento del PIB en 2015 y 2016, hasta el 3,5 y el 3,7 por ciento, respectivamente.

En dicho escenario, de acuerdo con el mismo FMI, las economías avanzadas crecerán sólo un 2,4 por ciento tanto en 2015 como en 2016 (y eso, por la fortaleza pasajera de EUA, que crecerá un 3,6 por ciento en 2015 y un 3,3 en 2016). En cambio, para los países “emergentes” reduce su previsión en seis décimas para 2015 y cinco décimas para 2016, al 4,3 y 4,7 por ciento, respectivamente (y eso, tomando en cuenta el comportamiento de la economía china, el motor principal, que crecerá un 6,8 por ciento en 2015 y un 6,3 en 2016).

A contrapelo de penurias como esas, un reporte dado a conocer el pasado 19 de enero por Oxfam en el más reciente Foro Económico Mundial de Davos, muestra que el 1 por ciento más rico del planeta ha visto incrementar su parte de la riqueza global del 44 por ciento en 2009, al 48 por ciento en 2014. Con este ritmo, Oxfam pronostica que para 2016 este 1 por ciento poseerá más del 50 por ciento de la riqueza mundial en sus manos. Tal inequidad, dice el organismo, anula de una manera dramática la lucha contra la pobreza global, sobre todo porque 1 de cada 9 personas no tiene lo suficiente para comer y más de mil millones de personas todavía viven con menos de 1.25 dólares por día.

Un entorno internacional en el cual muchos son perdedores. Y lo serán más en México si, como anuncia el funcionario mexicano, el proceso de “reingeniería” presupuestal del gobierno en los próximos meses es asesorado por el Banco Mundial; un organismo que no se tienta el corazón para dictar medidas draconianas en contra de las mayorías y no en contra de aquella minoría mundial ganona.

8 de febrero de 2015.
(Publicado: Revista Siempre!, México, 8 de febrero de 2015)
El Otoño del Imperio